Consejos para tener tu coche perfecto en verano

El verano acecha y el número de desplazamientos por carretera aumentan exponencialmente en esta época del año. Muchísimos españoles realizan viajes largos y el calor puede afectar negativamente al vehículo. Por eso desde Quiero mi Renting te traemos los mejores consejos para cuidar tu coche en verano y qué mantenimiento debes llevar al día para no correr peligro en la carretera. Además, puedes elegir entre nuestra variedad de ofertas, el mejor coche para viajar en verano

Más de un tercio de las averías en verano en los millones de coches de los conductores que se desplazan de vacaciones en verano, están relacionadas con el aire acondicionado o la climatización. Para saber cómo cuidar estos componentes y algunos otros como las ruedas, la tapicería o el motor, no te pierdas este listado de consejos separados en tres escenarios: antes de conducir, durante la conducción y después de conducir.

Antes de conducir

Seguir estas indicaciones antes de iniciar la marcha, te ayudarán a conducir de manera mucho más agradable. Muchas veces es más importante anticiparse a los hechos, que querer solucionarlos después. El calor es, sin duda, un acontecimiento climatológico difícil de combatir, así que estate atento a estas claves para mejorar la eficiencia en la conducción en esta época con temperaturas de 40 grados.

Bajar las ventanillas nada más subirte al coche sería el primer paso para evitar utilizar el aire acondicionado nada más arrancar. Generalmente si cogemos el coche tras mucho rato estacionados, la temperatura interior suele ser más alta que la del exterior por lo que así se igualarán las temperaturas.

Otra clave, seguramente la más importante sobre todo antes de emprender un viaje largo, es la de realizar un buen mantenimiento del coche y una completa revisión. Los elementos más importantes que hay que tener en cuenta en verano son:

• Comprobar los neumáticos: es importante comprobar la presión, el dibujo y la alineación de las ruedas antes de un viaje. Y más si es con alta carga de equipaje.
• Comprobar los líquidos: es necesario comprobar el nivel de los líquidos de frenos, el de la dirección, el refrigerante y el de aceite. El calor puede hacer que el coche consuma más, y hay que tenerlos en los rangos exigidos por el fabricante.
• Comprobar los filtros: estos son los filtros del aire, del habitáculo, del combustible y del aceite.
• Comprobar el estado de la batería: los picos de temperatura afectan a las baterías y por eso es importante que compruebes su porcentaje y estado antes de irte de vacaciones.
• Comprobar las luces del coche: muchas veces las luces se funden y nos damos cuenta porque alguien nos lo dice cuando circulamos. Pero hay que realizar una tarea de comprobación de que no haya bombillas fundidas o las luces hayan perdido fuerza lumínica y no sea seguro circular.

Durante la conducción

A partir de 50 km/h no se debe circular con las ventanillas bajadas ya que esto haría que se consuma mucho más combustible. Es mejor conectar el aire acondicionado. Se recomienda utilizar el aire a unos 21 o 22 grados centígrados. La conducción eficiente es importante también ya que, si mantienes una velocidad constante, siempre en marchas largas y usando el freno motor siempre que sea posible, será una conducción más llevadera y menos agotadora.

Es muy importante evitar circular a las horas de máximo calor. Puesto que esto ya no solo puede ser problemático para el conductor y acompañantes, sino sobre todo porque afecta a los componentes y a los neumáticos del coche, acortando su vida útil. Los coches ideales para viajar son las berlinas, por su amplitud de maletero y su confort de marcha.

Después de conducir

Una vez finalizado el trayecto ya sea corto o largo, uno de los hábitos que debes promover es el de aparcar a la sombra. En verano, el interior de un coche aparcado al sol puede alcanzar temperaturas de 50 o 60 grados. Por eso es aconsejable estacionar a la sombra incluso cuando es para una parada de unos pocos minutos.

Nunca dejes a los niños, personas mayores o mascotas en el coche y menos con el coche aparcado en el sol. En muy pocos minutos la temperatura del coche aumenta exponencialmente y puede poner en riesgo la salud de las personas o mascotas que se quedan en el coche.

Las ruedas son unos de los componentes que más sufren en verano por lo que hay que evitar situaciones como las de aparcar en un bordillo dejando la rueda subida o pillada con él. Esto a la larga puede derivar en un pinchazo.

Tampoco es recomendable dejar el coche al ralentí con el aire acondicionado puesto. Es una de las situaciones que más castiga la batería del coche. Ya que la batería gasta porque se está usando el aire acondicionado y no se recarga energía porque el coche no está rodando.